Mi confrontación con la docencia

MI CONFRONTACIÓN CON LA DOCENCIA

(ENRRIQUECIDO)

     Que tal compañeros y tutor, es un placer saludarlos en este medio maravilloso de la tecnología.

Cuando concluí mis estudios a nivel bachillero, me dediqué a trabajar un año y medio en compañías constructoras y finalmente en el complejo petroquímico “MORELOS” en el estado de VERACRUZ, debido a que no tuve una orientación eficiente, ya que en aquellos tiempos no sabía a que dedicarme, posteriormente dejé de trabajar e  ingresé a estudiar la carrera de  “ELECTROMECÁNICA” porque en el trabajo descubrí que me gustó la “ELECTRICIDAD”, en el mes de febrero de 1990, un amigo (Javier) me invitó a formar parte de la docencia en el colegio de bachilleres del estado de Oaxaca “plantel 05 Matías Romero”, como profesor de Física, me interesó su propuesta, he ingresé a trabajar al siguiente mes; en verdad me  sentí muy bien impartiendo clases de Física, lo curioso es que en mis estudio de “bachillerato”, siempre se me complicó estudiar y comprender la asignatura de Física, como docente, le dediqué mucho empeño al aspecto teórico y elaboración de prácticas en el laboratorio de Física, como novato, se me complicó que los alumnos comprendieran y aprendieran satisfactoriamente las clases, afortunadamente, se me fue facilitando mi labor docente debido a los cursos intersemestrales que ofrecía el sistema “COBAO”. En el mes de julio del mismo año, otro amigo (marcos) me comentó que el  CBTis 31 de la misma localidad, necesitaba un docente de mi especialidad para cubrir un interinato, misma que cubrí por un año, posteriormente obtuve mi basificación a partir del 01/SEP/1991 impartiendo materias de la especialidad de técnicos en ELECTROMECÁNICA y MÁQUINAS EN COMBUSTIÓN INTERNA; asistí a los cursos intersemestrales que ofreció el sistema “DGETI”, mismas que fortalecieron mis conocimientos de las especialidades impartidas. En el mes de octubre de 1998, me retiré del COBAO 05, porque tuve la oportunidad de alcanzar el tiempo completo en el CBTis 31, ya que solo existía el turno matutino en ambas escuelas.  Fue difícil dejar a mis compañeros de trabajo.  Inicié como profesor  porque tenía la esperanza de compartir conocimientos con mis alumnos y exprofesores del CBTis  No. 31, ya que en esta etapa como estudiante, fue la más feliz de mi vida estudiantil, quise conocer el otro lado en la docencia. En verdad me siento muy agradecido por la vida que me ha tocado en la docencia, ya que me siento muy comprometido con mis compañeros del plantel y principalmente con mis alumnos. El ser docente del nivel medio superior ha implicado el deseo de superación, ya que la tecnología avanza a pasos agigantados  y no es posible estancarse en el conocimiento. Debo agradecer a algunos directores que han apoyado a la especialidad de ELECTROMECÁNICA con la adquisición de materiales, herramientas y equipos, con el propósito de reforzar los conocimientos teóricos en las prácticas. La impartición de las secuencias didácticas en el aula, desloza el conocimiento en tres fases, mismas que se deben aplicar adecuadamente, ya que requiere técnicas de estudio, dinámicas grupales, proyección de videos y simuladores con el cañón proyector, libros actualizados, etc.  La satisfacción  que he tenido con mis alumnos es que ellos manifiestan un mayor aprendizaje con las demostraciones prácticas en el taller, hemos competido a nivel estatal en el concurso de “prototipos didácticos” con prototipos construidos en el taller de electromecánica. Reconozco mi insatisfacción por no poder competir aún a nivel nacional, no pierdo la esperanza, mas sin embargo, considero que el reto es: lograr el aprendizaje significativo en los educandos.

Es posible que mucha gente piense que ser profesor no es algo socialmente relevante, pues nuestra sociedad sólo valora el poder y el dinero; sin embargo, me siento orgulloso de mis estudiantes, ya que observo en ellos el esmero, la creatividad, el desarrollo, la superación, la perseverancia para seguir adelante; esta aventura de ser maestro me ha hecho sentir más humano, con mayor responsabilidad y vitalidad para seguir superándome, los tiempos cambian, al igual que la TIC’s, por ello, con mucho gusto y sacrificio, estoy inmerso en esta especialización, que me ha dejado muy sorprendido y satisfecho con la cantidad de conocimientos y experiencias adquiridos por mis compañeros y tutores en el manejo de las informaciones en este sistema electrónico virtual; pero a mí me queda el desafío del saber y la pasión por comunicarlo y aplicarlo en mis alumnos y colegas del plantel, con la firme convicción de lograr una superación personal en cada alumno, ya que en estos tiempos, se requiere de alumnos competitivos para continuar con sus estudios o incorporarse al sector productivo con calidad y eficiencia. A pesar de las carencias que tiene el taller de ELECTROMECÁNICA, seguiré luchando hasta obtener resultados satisfactorios en la actualización de herramientas y equipos para poder cumplir cabalmente con el desarrollo de las prácticas necesarias en cada submódulos  profesional. Pero eso no es todo, es necesario fomentar los valores y comprender las virtudes en los alumnos; con esta especialización, he aprendido que la educación escolar tiene que vincularse con el entorno, es decir, vivir la realidad del presente, con el propósito de contribuir con los conocimientos necesarios para resolver los problemas sociales, económicos, etc. que tanto adolece en nuestro país.

Como menciona Jordi Adell, tenemos talento, “construyamos juntos”, necesitamos espíritu para compartir, crear y elaborar cosas entre nosotros.

Elaboró: José Ernesto Chichino Velázquez